La siembra segura

Mateo 13:1-9

13:1 Aquel día salió Jesús de la casa y se sentó junto al mar.

13:2 Y se le juntó mucha gente; y entrando él en la barca, se sentó, y toda la gente estaba en la playa.

13:3 Y les habló muchas cosas por parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar.

13:4 Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las aves y la comieron.

13:5 Parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó pronto, porque no tenía profundidad de tierra;

13:6 pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó.

13:7 Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron.

13:8 Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno.

13:9 El que tiene oídos para oír, oiga.

Sabemos los que nos dedicamos a la agricultura que no todas las siembras son seguras, existen riesgos siempre de que algunas siembras se puedan perder y la palabra del señor dice que Jesús fue un sembrador por excelencia en ese tiempo que estuvo en la tierra, también todos aquellos siervos que él ha llamado a su reino se convierten en verdaderos sembradores, si bien es cierto que existe una siembra natural, Jesucristo nos puso ejemplos de las cosas materiales para aplicarlas a las cosas espiritual. La enseñanza de este día tiene un término espiritual y es a lo que hago referencia, cuando hablo de sembrador está hablando de personas cristianas que están enseñando la palabra de Dios, la semilla tiene que ser de excelente calidad, Jesús en las parábolas dice que la semilla no es nada más y menos que la palabra de Dios.

Entonces así todo aquel cristiano siervo de Dios, Jesús y apóstoles cuando hablan la palabra de Dios se convierten en sembradores y los que escuchan la palabra es el terreno donde se va sembrar esa semilla.

El sembrador salió a sembrar pero no toda la semilla que sembró produjo lo que él estaba esperando, Jesús esperaba una cosecha abundante y de buena calidad el sembrador siempre proporciona lo mejor a sus plantas, pero no todas las siembras son seguras, Las personas que recibieron la semilla de la palabra de Dios en sus corazones pero que son personas que no entienden lo que significa el evangelio, no entienden a Jesús, no entienden porque existen iglesias motivadas para poder enseñar la palabra, estas personas que no entienden con facilidad el enemigo de Dios les quita ese entusiasmo de seguir lo espiritual.

Cuando enseñamos el evangelio a personas que no entienden hay un riesgo que estas personas sean engañadas en el momento pueden llegar a tener entusiasmo pero como no entienden lo que significa Dios no entienden los grandes prodigios que Dios a hecho en su vida, que ha hecho con sus hijos, parientes les ha dado trabajo, entonces esa siembra no es tan segura es una siembra riesgosa. Pero de todas maneras el Señor dijo vamos a sembrar y no importa donde caiga la semilla.

Hay otra siembra que no es tan segura y es aquellas semillas que callo en pedregales, que esta representando a las personas que son afanadas que viven por lo material, personas ocupadas que no le quieren dar tiempo a lo espiritual, siempre están pensando que la vida nuestra depende de lo material, depende de los bienes que podamos atesorar en este mundo y no le damos importancia a lo que la palabra del Señor nos dice, pero Jesús nos habla que hay otro grupo de personas que entienden la palabra del Señor a perfección y que tienen la capacidad de escuchar el mensaje de Dios y lo entienden con facilidad, estas personas pueden producir los frutos que Dios está esperando de cada uno de nosotros, Dios espera buenas frutos, frutos que den Honra y gloria a su nombre, frutos que nos lleven a la vida eterna, entonces hay otro grupo de personas que entienden, que oyen entonces estos producen al 70 % producen al 100% porque son las que oyen con atención y entienden lo que es lo espiritual.

Qué bueno cuando entienden lo espiritual, la palabra del señor dice que no debemos ser oidores olvidadizos sino que debemos de oír la palabra y retenerla y ponerla en práctica porque cuando entendemos el reino de Dios, Dios es un ser poderoso, Recuerde cuando saco al pueblo de Israel, abrió el mar rojo, les dio comida, agua, provisiones y les dio todo lo que no imaginaban tener porque ese es el Dios que adoramos el que nos da las provisiones en ese momento que lo necesitamos, pero debemos entender que ese es el Dios que permite todo eso, pero si no entendemos la palabra de Dios entonces la siembra que Dios hace con su palabra no es tan efectiva, no es una siembra tan adecuado , esta se vuelve un poco desastrosa.

Gálatas 6:7-8

7 No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.

8 Porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna.

La palabra de Dios nos dice que las personas pueden ser de dos tipos de sembradores, un sembrador que siembra para la carne, siembra para las cosas materiales pero dice que el resultado de esta siembra no es algo que tenemos que desear, es una siembra inadecuada y el resultado de esta persona es corrupción.

La corrupción en nuestro mundo se puede ver en todas partes, porque las personas están sembrando para la carne, están cosechando corrupción.

Pero existen otro tipo de sembradores que es la invitación a que seamos asi que son los que siembran para lo espiritual y hay este grupo de personas que están sembrando las cosas del reino de Dios.

Mateo 6:33

Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.

Este grupo de sembradores comienza a sembrar lo espiritual, esta es una siembra segura como la que hizo Jesús en las personas que entienden. Nosotros debemos hacer esa siembra segura, como dice la biblia tenemos que hacer tesoros en cielo y esos son eternos, para todos los que leen basado en la palabra de Dios que lo mejor es sembrar en las cosas espirituales. Nunca dediquemos nuestros esfuerzos humanos, económicos, físicos en las cosas de la carne.

Una de las cosas que debemos aprender de esta siembra segura es que Dios como sembrador, Cristo como sembrador de su palabra en todas las personas lo que el espera es tener una buena cosecha, necesita tener personas que le crean a Dios y sean capaces de obedecer, quiere una generación de personas que le adoren en espíritu y verdad, personas dedicadas a la oración, a la meditación, para dar honra y gloria, espera esta cosecha de personas que le creen y que tienen un buen testimonio con sus vidas, que dedican sus vidas al servicio de Dios y que tienen una participación muy activa viendo las necesidades de sus semejantes y produciendo todos estos frutos como para el Señor, son personas que son partes de la cosecha de El señor que ha sido el resultado de lo que el sembró que se dedica a la evangelización porque así como recibimos así tenemos que dar, debemos de llevar esta siembra a nuestros amigos, parientes, vecinos. Dios quiere que esta cosecha sea un grupo de personas dedicadas ayudar el reino de Dios. Y eso espera que seamos lo mejor.

Dios siempre está pensando en que nosotros seamos salvos y debemos de tener ese mismo pensamiento de Dios, los que ya creímos en el evangelio en esa semilla que es la palabra de Dios sembrada en nuestros corazones, debemos de sembrarlo en el corazón de otra personas para que ellas también puedan alcanzar la salvación, si queremos lo mejor para nuestros hijos, sembrémosle la palabra de Dios en sus corazones, igual para nuestros familiares, amigos, a todas las personas que podamos tener contacto con ellas démosles algo seguro que es la vida eterna atreves de esa palabra bendita de El Señor que cambia y transforma la vida de las personas.

No dejemos que las cosas del mundo nos quiten lo que tenemos, Mantengámonos firmes, No dejemos que las cosas de la carne, no dejemos que los placeres, ni los afanes, ni las tribulaciones nos quiten lo espiritual que tenemos en nuestros corazones.

Por: Jose Luis Iglesias